Curso de Tatuaje. Intento 1º

   Ayer, el amable chico de la Escuela Oficial de Tatuadores de España, me sacó de la cama diciendo que sentía no haber podido contestarme ayer al e-mail (un chico muy atento), y me invitó a pasar a ver las instalaciones al día siguiente (hoy) y a hacer la matrícula allí, después de solventar un par de dudas, a lo cual respondí que sí encantada.

   Pues bien. Hoy era ese día, y allí estaba yo, a la hora y lugar acordados, más bien temprano porque luego tocaba hora de piscina. Llegué allí a las 10, y el portero me dijo que los de la escuela de tatuaje no habían llegado. Estuve esperando sin dejar de llamar al móvil de la escuela que estaba apagado y con el buzón de voz, cosa que me ha salido cara.
   Pasó una hora y ya que estaba, no me importó que pasasen 2. Es decir, a las 12, informé al portero de que se me habían acabado las cosas que hacer allí depié, en mitad del centro de Valencia, rodeada de señores trajeados con corbata y chaqueta (con el calurcio que hace...). Incluso me tomé un café con tostada que me costó casi tres pavos de puro aburrimiento! 

   Entonces, y sólo entonces, el tío de la portería me dijo que iba a buscar el número de teléfono del particular, que suelen tener para las emergencias. Después de sólo dos horas de espera! ¬¬

   Justo cuando iba a hacer la última llamada desesperada antes de meterme en el metro de vuelta a casa, me contestó un tal Antonio, profesor de Historia del Tatuaje, que acudió en diez minutos a la escuela sólo para disculparse y enseñarme las instalaciones. El tío era majísimo, y era un enamorado del tatuaje sin remedio. Hemos estado como una hora hablando de los detalles del curso y me estuvo enseñando libros de artistas japoneses (alguno con cierto reparo por contener numerosas ilustraciones de carácter erótico xD) y de artistas internacionales, con unos diseños para babear.

   Al final, el tío me confesó que estaba preocupado por el chico que no había aparecido, pues dice que no falta a las citas y que es puntual...
   Nos despedimos y se marchó en su moto enorme, como no podía ser de otra manera. xD


   Yo he pasado el resto del día en la piscina, con mi familia y la trupe de niños que ello conlleva :)


   Pues bien, al volver a casa Antonio me ha llamado al móvil diciendo que ya había aparecido el otro chaval:

...Estaba en la Tomatina de Bunyol...