jueves, 8 de septiembre de 2011

Curso de Tatuaje: tercer y cuarto días

   Bueno, primero que nada siento no haber publicado ayer (que sé que hay gente que lee, pero no comenta... xD) pero estaba agotada y llegué a casa justito para meterme en la cama. Parece que no, pero pasar del verano a levantarse durante toda la semana a las siete de la mañana... cuesta, y cuesta mucho. A parte llego a casa sobre las ocho y en fin, no me queda tiempo para mucho... En fin, dejo de enrollarme, que hoy toca 2x1, que ya es bastante largo.

   TERCER DÍA
   Ayer estuvimos todo el día con Antonio, el profesor de Historia del Tatuaje y Antecedentes, un amante de la Old School y más majo que las pesetas. Por la mañana estuvimos dando la evolución de las máquinas de tatuar, que son derivados de una máquina de Thomas Edison, que en origen era una "Lapicera perforadora" para grabar en el metal o la madera. Quien adaptó la máquina para el tatuaje, fue Samuel O'Reilly, que patentó la primera máquina eléctrica para tatuar en 1891. Hicimos un recorrido muy interesante desde las espinas de pescado que se utilizaban hace 30.000 años para realizar tatuajes, hasta las máquinas más modernas o incluso los prototipos de futuribles máquinas aún por crear. Después tuvimos el gran placer de ir al estudio de Antonio que está junto a las Torres de Serrano. Visitamos su pequeño gran museo, en el que tenía máquinas y herramientas para tatuar de todas las formas, tamaños, estilos y colores. Una pasada. Tenía punzones japoneses o herramientas de la Polinesia, realizada con los incisivos del jabalí, conchas de caparazón de tortuga, y clavículas de ave. Incluso una máquina realizada precariamente en una cárcer, con una maquinilla de afeitar, un transformador y un motor de una radio y la mina de un boli bic de los de toda la vida, guardada como oro en paño en una cajita forrada con terciopelo rojo. Después subimos a los "boxes" lugar donde ejerce cada tatuador, pudiendo ver los diseños colgados por todas las paredes y el orden y la limpieza requeridas. Allí trabaja el hijo de antonio, Jeroni, de 22 años, que nos hizo una demostración de unos truquitos para dibujar su especialidad: tradicional japonés. En vivo y en directo es donde mejor se veía la destreza que tenía el chaval, que pertenece ya a la tercera generación de tatuadores de su familia.
   Por la tarde, montamos y desmontamos la máquina, esta vez con los tubos y la aguja, aprendiendo cada pequeño detalle a tener en cuenta. Por desgracia, en la puesta a punto que realizó el profesor, descubrió que uno de los tornillos que sujetaba la bobina no estaba bien colocado y la bobina estaba casi suelta, con lo cual me llevé un merecido rapapolvo >_<. Así montamos y desmontamos varias veces la máquina, para coger soltura en el proceso y no estropear la aguja al introducirla en su lugar.


   CUARTO DÍA
   Hoy hemos acabado el temario de Historia del Tatuaje y Antecedentes, y hemos hecho un pequeño repaso. Después, el profesor pretendía hacernos el test, pero hemos preferido que fuera más adelante, para poder repasar nombres, fechas y distinguir bien entre las distintas tribus y demás, pero sólo hemos conseguido que retrasase el exámen hasta mañana a medio día, pues la semana que viene ya tocan todas las prácticas, que de hecho, ya hemos empezado por la tarde.
   Después de comer ha venido un nuevo profesor que se encarga de Agujas y Materiales y La Piel y el Transfer. Es un hombre alto, rapado y con una imponente barba, cuyos brazos están tatuados con diferentes obras de diferentes artistas y diferentes estilos, casi sin dejar un sólo centímetro libre de tinta. Ha estado hablándonos de las diferentes agujas y para qué sirve cada una, de las medidas higiénicas y de alguno de los problemas con los que nos podríamos encontrar y cómo solucionarlo. Luego hemos pasado al tránsfer. Después de una rápida teoría, hemos pasado a la práctica, en la que nos han facilitado un diseño de un tatuaje sacado de una revista, lo hemos repasado sobre un papel de calco, para que el diseño quedara invertido. Después sobre la piel de un compañero poníamos un ungüento similar al alcohol pero con textura de gel, en la zona en la que queríamos realizar el supuesto tatuaje. Luego aplicábamos el diseño en la zona y ejercíamos presión homogéneamente. Y nada, este es el resultado:

Transfer realizado por mía sobre la piel de un compañero :)
   Está algo desplazado hacia arriva y en la zona del centro la línea está dobre, pero bueno, es el primero. Luego he hecho otro en la espinilla de otro compañero, pero ese salió peor, por la zona y supongo que porque era la segunda vez que utilizaba el mismo calco. Después hemos hecho lo mismo sobre la piel artificial. Mañana empezaremos con las prácticas sobre la piel artificial, a ver qué tal.

Transfer sobre la piel artificial.

   He disfrutado mucho estos dos días, y tengo ganas de "pinchar" como dice el profe, y probar la tinta. Y bueno. Mañana más y espero que mejor. :) Espero no haberme enrollado más de lo necesario.

1 comentario:

MeiK dijo...

que interesante todo lo que cuentas! algún día te pediré que me hagas uno, llevo toda la vida queriendo un tatuaje pero nunca tengo huevos ^^U